González Fraga sigue dilapidando el dinero de todos
PIM: El fracaso de la tarjeta del Nación
banco estatal se gastó mas de $700 millones en desarrollar una billetera digital, que funciona tan mal que la Anses tuvo que optar por la plataforma de Galperín para una primera prueba con la AUH.
Un nuevo fracaso de la actual gestión del Banco Nación LPO
Se trata de la muy promocionada "billetera virtual" PIM, un sistema de pago digital que demandó a la conducción de la empresa Nación Servicios que preside el CEO, Benoit Culot. La iniciativa fue presentada como el gran hito de la gestión "modernizante" de Beoit y los directores, Diego Hernán Juárez, Juan Castelnau, Efraín Puyó Peña y Álvaro Iriarte, todos provenientes del sector privado que, con el arribo de Macri al poder, desembarcaron en la controlada del Banco Nación.
Culot es un hombre del ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, que
logró así quedarse con el control de la SUBE, un sistema de pagos
digitales que el macrismo quiso "mejorar", hasta ahora sin mayor éxito.
Como
ocurrió en otras áreas de esa institución, detrás de un discurso
eficientista, los CEO se multiplicaron el sueldo y perdieron tres años y
más de 700 millones de pesos en "desarrollar" un producto que tuvo cero
aceptación en el mercado, además de superponerse con la SUBE
desarrollada por la anterior gestión kirchnerista. "Nunca hubo un
estudio serio de mercado, ni un plan de negocios para Nación Servicios",
explicaron a LPO fuentes de la empresa.
El equipo de CEOs conducido
por Benoit Culot se pasó tres años y gastó más de 700 millones de pesos
para desarrollar la billetera electrónica PIM, que terminó siendo un
completo fracaso. Con nula aceptación en el mercado, no consiguió ni
siquiera resolver los contratos en mano que le dio el Gobierno.