Juan Zabaleta explica paso por paso cómo se transformarán los planes sociales en empleo registrado
Juan Zabaleta explica paso por paso cómo se transformarán los planes sociales en empleo registrado
Por Laura Vales-Pagina 12 . Juan Zabaleta está en sus primeras semanas en Desarrollo Social, que es cuando se barajan las relaciones con movimientos populares, gobernadores, intendentes, la iglesia. El 10 de agosto asumió como ministro; en los días que siguieron firmó convenios con la Pastoral Social, participó --sin darle difusión-- en un plenario del Movimiento Evita, estuvo en la provincia de Buenos Aires con Axel Kicillof y Andrés "Cuervo" Larroque --la interna de Juanchi con La Cámpora venía siendo cubierta y sobrecubierta por los medios--; y, tras un corte de la 9 de Julio, se comprometió a dialogar con las organizaciones sociales de la izquierda. Atender a cada uno de estos actores, negociar con todos, es la espada y el karma de los ministros de Desarrollo Social.
Menos mediática, pero con mayores consecuencias, es su función de
definir qué perfil tendrán las políticas de la cartera. Zavaleta habla,
en este sentido, de empalmar los planes Potenciar Trabajo con el empleo.
"Tenemos la decisión, como Estado, de iniciar ese camino", aseguró en
un reportaje que otorgó a cuatros diarios nacionales, entre ellos
Página/12.
El lugar de la entrevista es José León Suárez, centro
emblemático de la exclusión. Pegado al cinturón del Ceamse, este es el
territorio donde miles de personas, a partir de los '90 en adelante, se
encontraron --violentamente-- con que se les cerraba la puerta del
trabajo formal. Subsistieron con la basura. 30 años después, algunas de
las cooperativas cartoneras hacen manufacturas, algunas cuentan entre
sus integrantes a egresados de la Universidad Nacional de San Martin,
algunas convenian con municipios la recolección diferenciada, hechos que
muestran el enorme esfuerzo social puesto en salir. Pero es claro que
la exclusión persiste, que nunca llegó a solucionarse. Los cuatro años
de gobierno macrista y la pandemia pegaron sobre esa fragilidad con la
misma dureza que los '90.
--¿Cómo ve la situación social hoy?
--El
ministerio de la emergencia, de la Tarjeta Alimentar, el IFE, el ATP,
es el ministerio de cuando le tuvimos que pedir a los argentinos y
argentinas que se quedaran en casa. Estoy convencido que en la
postpandemia el ministerio que viene es el del Desarrollo. Un eje
importante que me tracé es la transformación de los planes Potenciar
Trabajo en trabajo registrado. Ya lo empezamos a hacer con el trabajo
rural, y vamos a seguir con otras actividades. No lo podemos anunciar
ahora por la veda electoral, pero vamos a seguir trabajando en esto con
otros sectores de la economía y la producción.
--¿Qué es, concretamente, la medida?
--Es
que gradualmente los planes se transformen en trabajo. El ejemplo, hoy,
es el trabajo rural. Hay 150 mil argentinos en el trabajo temporario en
la cosecha, que al tener el plan Potenciar Trabajo, la AUH o la Tarjeta
Alimentar no accedían al trabajo registrado porque no querían perder el
plan social. Ahora eso se compatibilizó (quienes sean registrados para
trabajar temporariamente en la cosecha no perderán el Potenciar Trabajo,
la Tarjeta Alimentar o la AUH). Los productores que nos pidieron la
posibilidad de esta transformación perdieron el 30 por ciento de la
cosecha por no tener mano de obra. Entonces, esto suma a fortalecer las
economías regionales, las exportaciones, a poder garantizar que la
cosecha salga bien. Es el círculo virtuoso que vamos a intentar
construir.
--Esos empleadores privados, los del trabajo rural, vienen
de prácticas que niegan derechos laborales: mantienen a los
trabajadores en negro, pagan a destajo. Para que un plan social se
transforme en empleo, ¿no hacen falta otras medidas, además de la simple
transferencia de ingresos?
--No es una simple transferencia. Hoy
estuvimos en el Gabinete Económico, decidimos empezar a trabajar este
tema articuladamente con el ministerio de Trabajo y con el ministerio de
la Producción, por esto que dice, para cuidar mucho la situación de la
informalidad que hay en algunos rubros. Está claro que nosotros, como
estado, nos vamos a ocupar de esa situación. Pero tenemos la demanda por
parte del sector privado, del sector empresario, y tenemos la decisión
como estado de iniciar ese camino. ¿Por qué lo hacemos? Porque estamos
saliendo de la pandemia, esperemos que la variante Delta no nos
complique, y estamos viendo mucho más movimiento. A partir de eso se va
generando esta demanda de articulación. Nosotros lo vimos en Hurlingham:
funcionan las unidades productivas, los polos textiles, todo eso da
mucha capacitación y se asume la demanda del sector privado.
--¿El
esquema es que el Estado siga pagando los 13.600 del plan Potenciar y el
empleador pague otros 13.600 hasta completar el salario mínimo?
--Que
el empleador lo complete llegando al salario de convenio, no al minimo
sino al de convenio. Es decir, que no haya discordancias con el salario
que se acordó en la paritaria con el gremio.
--¿Va a incorporarse más gente al Potenciar Trabajo?
--Por
ahora no va a haber más incorporaciones. Sí hay un sistema de altas y
bajas que está funcionando y a partir de eso se pueden hacer
inscripciones. Lo que pretendemos, sí, es que todo se vaya
transformando gradualmente en unidades productivas o empleo, para ir
hacia el camino del trabajo registrado.
--Juan Grabois viene
reclamando un salario básico universal para 8,5 millones de personas,
¿es factible que el gobierno lo implemente?
--La Argentina que viene
va a tener en discusión, arriba de la mesa, nuevos instrumentos y nuevas
herramientas. Si eso sirve para complementar la construcción de trabajo
genuino, todo se va a discutir. Lo que no significa que todo se
resuelva, pero todo va a estar en discusión.
La foto y la película
--¿Qué ánimo percibe en la calle para las elecciones?
--Los
problemas que dejó la pandemia son enormes: fallecidos, desempleos,
rupturas en el núcleo familiar. Pero en septiembre la sociedad va a ir a
plebiscitar nuestro gobierno, no tengo ninguna duda.
--El ministro Jorge Ferraresi dijo que Alberto Fernández debería tener un segundo mandato de gobierno. ¿Coincide con eso?
--Sí, yo estoy de acuerdo. Claramente, un gobierno tiene éxito cuando existe la posibilidad de poder estar cuatro años más.
--¿Es el proyecto del Frente de Todos?
--El
proyecto del Frente de Todos es poner la Argentina de pie, recuperar la
economía, seguir consolidando el sistema sanitario, mejorar el sistema
educativo, seguir creando universidades públicas.
--¿La foto de la fiesta en Olivos impacta en el voto en los barrios?
--Ya
hablé de la foto y me gusta hablar de la película. Del 10 de diciembre
en adelante, de lo que les conté: ATP, IFE, Plan Potenciar, ayuda a las
empresas, crédito a los monotributistas, sistema sanitario. En medio de
una pandemia sostuvimos el empleo de los argentinos y me parece que esa
es la película. Tenemos un presidente que se puso sobre sus espaldas la
negociación de las vacunas y hoy estamos con el 65% de los mayores de 50
años con la segunda dosis.
--Hablaba de plebiscitar la gestión.
Macri en 2017 ganó por amplio margen y pocos meses después se vino todo
abajo. ¿No se puede repetir eso en un país con un 51 por ciento de
inflación interanual?
--No por el camino que va a transitar Argentina
de acá para adelante, que es de crecimiento. Disperso, pero de
crecimiento. Venimos de una pandemia y en una pandemia tenemos
indicadores de inversión privada mucho mejores que los de la época de
Macri. Eso nos alienta, nos entusiasma haber tenido casi 900 inversiones
por 35 mil millones de dólares desde enero de 2020. Este camino es de
crecimiento, de fortalecimiento del presidente y de unidad del Frente de
Todos.
--A propósito del reconocimiento de la UTEP, el ministro de
Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés Larroque lo calificó como
un sindicato de pobres.
--Al otro día de que asumí, a las siete de la
mañana estaba con el Cuervo en Saladillo, a raíz de que hubo un
tornado, haciendo lo que hay que hacer. Con el Cuervo y con todos los
que integran nuestra fuerza política compartimos este objetivo. Más allá
de alguna opinión, todos compartimos la necesidad de que la Argentina
genere empleo y que nuestro ministerio se pare en el lugar de la
reconstrucción. Somos un frente político que se fortalece en la
diversidad, y esa es una característica de los movimientos populares.
Más allá de discusiones muy menores, es en el paraguas de la unidad que
tenemos la responsabilidad de llevar estas políticas para recuperar la
Argentina. Así lo vamos a hacer y así va a salir bien.
--La semana
pasada hubo una marcha importante de sectores de izquierda al
ministerio. Surgió de allí una denuncia, porque se detectó que algunas
personas tomaban lista de asistencia. ¿El ministerio tomó alguna acción?
--Nosotros
no vamos a generalizar en todas las organizaciones sociales. ¿Hay
marginales? Sí, ¿Hay manipuladores? Sí. El ministerio ya está trabajando
en profundizar herramientas de transparencia y de control para
interactuar más directamente con los beneficiarios. No vamos a enlodar
el trabajo de los hombres y mujeres que hacen las cosas bien. Con el
ministerio de Trabajo y la UTEP vamos a trabajar en controlar
efectivamente lo que se hace en cada unidad productiva y publicarlo.
Vamos a avanzar en un trabajo de transparencia.