Que pase el que sigue
Un crimen que desnuda el doble discurso PRO. El actual ministro de Seguridad porteño y exsegundo de Bullrich en el gobierno de Mauricio Macri llevó una "agenda reservada" a Nueva York, hasta que se filtró un video donde se lo ve disfrutando del US Open. Por Matías Ferrari. En el Gobierno de la Ciudad tronó el escarmiento este jueves contra el ministro de Seguridad y Justicia, Eugenio Burzaco. En la sede de Parque Patricios lo acusan de no haber puesto la cara luego del crimen del ingeniero civil Mariano Barbieri, de 42 años, a quien apuñalaron para robarle el celular frente al Parque Tres de Febrero, en Palermo, una de las zonas más caras de Buenos Aires donde no hay, curiosamente, cámaras de vigilancia. El Ministro no pudo ponerse al frente de la crisis en materia de inseguridad que desatan este tipo de robos seguidos de muerte —sobre todo en medio de la campaña electoral— porque, básicamente, está de viaje en Estados Unidos. Para su mala fortuna, 48 horas antes del hecho se filtró un video en redes sociales donde se lo ve, relajado, disfrutando de un partido de tenis del US Open desde una de las tribunas.
La ausencia del ministro y la filtración del video vacacional generaron
ira en la jefatura de Gobierno porteña. De las explicaciones del hecho
tuvieron que hacerse cargo funcionarios de segundas líneas y el jefe de
Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, no tuvo a mano un pararayos, más
bien lo contrario. “Cuando aparecen casos como este, que yo cuente que
la estadística de Seguridad en la Ciudad está mejorando, no sirve de
nada. El caso de hoy es el 100%”, tuvo que explicar. Lo mismo le sucedió
a la candidata presidencial de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich,
quien se limitó a decir que “vamos a mejorar la seguridad en todo el
país para que esto no suceda más”, aunque omitió que Burzaco fue su mano
derecha durante su paso por el Ministerio de Seguridad de la Nación,
hasta 2019. Los reproches, puertas adentro, estuvieron igualmente a la
orden del día. Burzaco recibió enseguida la orden del ministro
coordinador, Felipe Miguel, de interrumpir su estadía en el país del
norte y regresar de inmediato a la Argentina. Lo hará recién este
viernes, pero no está claro que pueda dar una respuesta inmediata. De
acuerdo a los últimos partes de la Fiscalía en lo Criminal y
Correccional Número 36, a cargo de la investigación, la reconstrucción
del crimen se complicó por la ausencia en la zona de cámaras de
vigilancia. Un notero tuvo, además, más pericia que la propia policía, y
halló la supuesta arma homicida.
Según confiaron desde su entorno,
Burzaco está en Nueva York desde el fin de semana pasado, para una gira
que “estaba programada desde hace mucho tiempo y que se fue postergando”
por pedido de la jefatura de Gobierno “así no quedaba raro en medio de
la campaña”, y que incluyó —aparentemente— reuniones con funcionarios de
la OEA y el FBI. No hubo fotos de esas reuniones ni la gira fue
comunicada por los vehículos informativos tradicionales del Gobierno
porteño, tampoco en la cuenta de Twitter de Burzaco. Lo único que se
conoce del viaje es el video en las tribunas del US Opem, donde se lo ve
con gorra y lentes de sol alentando al tenista argentino Juan Manuel
Cerúndolo. “Una vez terminada la agenda de ese día su sobrino lo invitó a
ver el partido”, explicaron desde el Ministerio.
Página/12 consultó
detalles de esa agenda de trabajo, pero obtuvo como respuesta que “no se
puede mostrar” porque "se está esperando la autorización de Estados
Unidos de algunas personas, que pidieron reserva”. Por lo pronto, desde
Parque Patricios trinan de bronca y lo esperan, mínimo, con el reproche
de “un viaje totalmente innecesario” y debiendo enfrentar múltiples
pedidos de renuncia del funcionario.
Desgobierno en CABA
“Alguien
tiene que explicar qué hacía en un viaje por Estados Unidos un ministro
de Seguridad que lleva cinco meses en el cargo y que en tres meses va a
dejar su función”, le dijo a este medio el candidato de Unión por la
Ciudad, Leandro Santoro, quien difundió el video de Burzaco a través de
sus redes. “A esta altura ya no sorprende. Estamos ante un desgobierno
en la Ciudad, sobre todo en materia de inseguridad”, sostuvo.
El
candidato también señaló que en el barrio de Palermo “hay varias zonas
liberadas, el propio mapa del delito de la Ciudad demuestra que es uno
de los barrios con más robos”. Según los propios números oficiales de
CABA, en 2021 —último año disponible, ya que el Ejecutivo todavía debe
su informe de 2022— en ese barrio se registraron 3409 “hurtos totales”,
muy por encima de los 1708 contabilizados, por caso, en Caballito, o los
738 de Constitución.
Un estudio reciente del Centro de Estudio
Metropolitanos (CEM) remarca que los robos y hurtos se concentran
repetidamente en las comunas 1, 3, 4, 7 y 14 (Palermo). “Esa continuidad
demuestra que no existe la videovigilancia de la que pregonan el
Ministro y el jefe de Gobierno, y el despilfarro de recursos, que por
otra parte, aunque no lo mencionan, también afecta a Seguridad, que
tiene sub ejecuciones”, sostuvo el director del CEM y legislador porteño
Matías Barroetaveña.
Ante la ausencia de Burzaco, quedaron a cargo
del hecho el jefe de la fuerza, Gabriel Berard, y el comisario general
Miguel Fornaro. Berard está apuntado como uno de los responsables del
encubrimiento del crimen por gatillo fácil del joven Lucas González.
Durante los alegatos previos al fallo, los abogados de dos de los
policías posteriormente condenados lo nombraron como uno de los
principales interesados en que nada se investigara, dado que el día del
asesinato de Lucas –el 17 de noviembre de 2021– la Policía de la Ciudad a
su cargo festejaba un nuevo aniversario de su fundación. “Es una de las
explicaciones todavía pendientes que tiene el Jefe de Gobierno, cómo es
posible que la policía la siga manejando un personaje acusado de
encubrir un asesinato”, remató Santoro.
Burzaco y la policía porteña
Burzaco
llegó a conducir la Policía de la Ciudad luego de la renuncia de
Marcelo D'Alesandro, quien primero se tomó una licencia y luego dejó el
cargo en el Ministerio de Seguridad tras la filtración de sus chats
vinculados al escándalo de Lago Escondido. Entre la licencia de
D'Allesandro y la confirmación de Burzaco, la Ciudad estuvo más de 60
días sin ministro de Seguridad, en plena campaña de Rodríguez Larreta
como precandidato presidencial. A fines de 2009 reemplazó en el mando de
la entonces Policía Metropolitana a Osvaldo Chamorro (exmano derecha de
Jorge “Fino” Palacios). Antes había sido asesor de Seguridad del
exgobernador de Neuquén, Jorge Sobish, durante el asesinato del docente
Carlos Fuentealba. El CV represivo lo completó desde la Fundación
PensAR, donde compartió oficinas con el exagente del Batallón 601 de la
última dictadura militar, Jorge Cirino. Su último cargo en la materia lo
desempeñó entre 2015 y 2019 bajo el mando de Bullrich, como secretario
de Seguridad de la Nación. Tuvo a su cargo el control de la Gendarmería
durante la desaparición forzada de Santiago Maldonado y el asesinato de
Rafael Nahuel.
Burzaco ostenta un récord: haber conducido la fuerza
de seguridad más letal que se recuerde, a decir de la titular de
Correpi, María del Carmen Verdú. La Policía Metropolitana, que se
fusionó en 2016 con la Federal para la Policía de la Ciudad, asesinó al
menos a 25 personas en casos de gatillo fácil dentro del territorio
porteño antes de su disolución, según un reporte del Mapa de la Policía.
Entre los hits de su primera etapa conduciendo una fuerza pública,
se recuerdan la represión en el Hospital Borda, en 2012, y la desplegada
junto a la Federal para el desalojo del Parque Indoamericano, en 2010,
que dejó tres muertos por balas de plomo.
Burzaco también estuvo a
cargo de la Policía de la Ciudad durante la muerte de Facundo Molares,
pocos días antes de las PASO, durante una protesta reprimida por esa
fuerza. “Los violentos fueron los manifestantes que golpearon a la
Policía”, dijo ese día.