El gobierno anunció la libre importación de alimentos
El gobierno anunció la libre importación de alimentos para bajar una inflación descontrolada. Lo confirmó el vocero presidencial Manuel Adorni, en conferencia de prensa. El gobierno nacional que conduce Javier Milei anunció este martes la apertura definitiva de la importación en el rubro alimenticio. El vocero presidencial Manuel Adorni confirmó la iniciativa. La economía, de a poco, se va normalizando y, en esta línea, se ha tomado la determinación de abrir definitivamente las importaciones de determinados productos de la canasta familiar
. La idea del gobierno es «hacer los precios más competitivos, en
beneficio de la familia, de los consumidores argentinos, con algunas
quitas de impuestos a esos productos importados, para ayudar a la
normalización en los precios de estos productos, que aumentaron más de
lo debido, reconocido por los propios empresarios».
La decisión del
gobierno se toma luego de una reunión que el ministro de Economía Luis
Caputo mantuvo con empresarios del sector, en el marco de una suba de
precios descontrolada en el sector alimenticio y de una fuerte suba de
la inflación y de la pobreza en los primeros dos meses de gobierno.
En
ese marco, en las últimas horas el presidente Milei había criticado las
promociones en supermercados que, a su criterio, no colaboraban con la
medición de la inflación, ya que los precios en rigor se mantienen,
aunque bajan en la práctica a partir de esas promociones. Con todo, se
puede inferir el gobierno interpreta que los supermercados promueven el
alza de precios, algo que es en principio contrario a la ideología
libertaria que, como suele recordar el presidente, entiende a la
inflación como un fenómeno exclusivamente monetario.
Importación vs industria
El
principal peligro de la apertura de importaciones es el impacto que
puede tener en la industria nacional, ya que muchas veces las empresas
argentinas no pueden competir con productos de otros países cuyos costos
son muchos más bajos. Esto suele redundar en un fuerte achicamiento de
la industria local y, con ello, la pérdida de numerosos puestos de
trabajo.