Siguen los cierres y los despidos
* “Las tradicionales marcas de jeans Wrangler y Lee dejan el país y despiden a 200 trabajadores. Así lo decidió la estadounidense VF Corporation, propietaria de ambas etiquetas”. Las marcas habían comercializado sus productos en Argentina durante 50 años. Tenían producción en Benito Juárez, en Buenos Aires, y en La Rioja, plantas que también cerraron.
* “Después de 70 años cerró la fábrica de mermeladas La Campagnola en San Martín y despidió a 125 personas”, retrató el diario Uno de Mendoza en mayo último. “Los directivos de la compañía, propiedad del grupo Arcor, adujeron que los balances de los últimos tres años han sido totalmente negativos”, agregó. La empresa había arrancado sus actividades en 1950.
* “El domingo fue la última jornada del Shopping de Villa del Parque.
Había sido inaugurado en 1995 y tenía 54 locales. El último día los
vecinos lo recorrieron buscando ofertas y liquidaciones en negocios que
ya estaban casi vacíos”, retrató Iprofesional hace diez días. “Es el
primer shopping que cierra en la Capital Federal”, puntualizó.
* “La
fábrica de alfajores cordobesa Estancia El Rosario despidió al 80 por
ciento de sus trabajadores y está al borde del cierre. Había sido
fundada en 1924. Solo le quedan seis empleados, a quienes les adeuda el
sueldo. Los problemas en la empresa empezaron en 2016 con la caída del
consumo y el incremento de costos”, indicó el portal M1 en junio pasado.
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“Freddo cerró la fábrica en Balvanera y despidió a 280 trabajadores.
Tercerizará la producción y dejará de tener locales propios. Ahora todas
las heladerías serán franquicias. En la empresa afirmaron que este año
el consumo bajó más que en períodos anteriores y cuestionaron los altos
costos de producción”, señaló el diario La Nación en septiembre pasado.
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“Cerró la tradicional casa de indumentaria femenina Chocolate. La marca
surgió en la década del ’80, pero explotó en los ’90 en pleno furor
menemista, cuando llegó al tope de ventas. ‘El anuncio de cierre fue un
baldazo de agua fría. Estaba ahí hacía 18 años. Fue mi primer trabajo.
Tengo 42 años. Vi su crecimiento, ahora veo el final y es
dolorosísimo’”, lamentaba Guadalupe, una de sus ex vendedoras, en la
crónica del portal SN Online en septiembre del año pasado.
Pelopincho
despidió a 38 trabajadores de su fábrica de San Luis. “A la gente no le
alcanza para la comida menos nos va a comprar una pileta”, explicó su
dueño, Héctor Goette, a principios de junio. “La fábrica de heladeras
SIAM se convirtió en un símbolo de la debacle industrial. La planta de
Avellaneda había sido reinaugurada en 2014 con 400 empleados. Ahora solo
quedan 60. Los despedidos acampan en la puerta. La fábrica está
militarizada”, indicó Tiempo Argentino en noviembre pasado. “Cerró la
Cacciola y ya no se podrá a viajar a Uruguay desde Tigre. Hubo 40
despidos” (1 de julio). “Zanella cerró una de las fábricas de motos más
importantes del país en Mar del Plata” (28 de junio). “La cadena de
supermercados Emilio Luque cierra locales en Santiago del Estero,
Tucumán, Salta y Catamarca y peligran 1000 empleos” (29 de junio).
“Bronca y tristeza por el cierre de la editorial SM. Despidió a 130
trabajadores (11 de julio). “Tras 43 años cerró la fábrica ‘Mielcita’:
más de 100 personas se quedaron sin trabajo. Además de las tradicionales
mielcitas producía los jugos Naranjú” (12 de julio). “Musimundo sigue
cerrando sucursales. Ya van 32 desde el año pasado” (6 de mayo). “Cerró
la tradicional cadena de supermercados El Planeta en Tres Arroyos”
(julio de 2018). “Cierra el mítico bar Los Angelitos de Florencio
Varela” (septiembre de 2018). “Puma cerró su fábrica en La Rioja y echó a
40 empleados” (13 de junio). “La cadena de electrodomésticos Frávega
cierra cinco sucursales y Garbarino se atrasa en el pago de sueldos”
(octubre de 2018). “Cerró la tradicional fábrica de marcadores Edding en
San Juan. Despidió a todos los empleados y empezará a importar los
productos desde Alemania” (28 de mayo). “Calzados Mas Ven, emblemática
zapatería de Posadas, liquida stocks y cierra sus puertas
definitivamente” (8 de mayo). “Tras 51 años de historia, cerró el
tradicional Hotel Luz en Nogoyá” (2 de abril). “Renault cierra
Metalúrgica Tandil y despide a más de 100 trabajadores” (octubre de
2018). “Topper, Wanama, Ay Not Deado Legacy, casi ninguna marca se salva
de la crisis del sector textil. Todas están con planes de ajuste o en
convocatoria de acreedores” (8 de febrero). “Tras 75 años cerró el
taller Palagi Hermanos en Temperley” (noviembre de 2018).
La lista es
apenas un muestreo incompleto de los últimos meses. Hay muchísimas
otras marcas que han caído por la política económica a lo largo y ancho
del país. Las realidades productivas, del comercio y el consumo son
similares en gran parte de la Argentina. Sin embargo, el presidente
Macri quiere ir más rápido por el mismo camino, dejando su marca en la
historia nacional.